La industria tecnológica se ha enfocado en el último par de años en el desarrollo y adopción de la inteligencia artificial, particularmente del tipo generativo, porque tiene el potencial de impulsar la economía global. Sin embargo, este optimismo parece estar desvaneciéndose entre los inversionistas y eso se refleja en las caídas en la bolsa de empresas como Microsoft y Nvidia.
La empresa liderada por Satya Nadella reportó buenos resultados trimestrales con ganancias por 22 mil millones de dólares entre abril y junio, pero los datos de su plataforma Azure, la cual alberga una buena parte de sus herramientas de inteligencia artificial, no cumplieron con las expectativas del mercado pese a crecer 29% en el periodo.
Lo anterior provocó que las acciones de Microsoft cayeran en las operaciones previas al miércoles, jornada en la que siguieron a la baja levemente hasta ubicar la acción en 418.35 dólares. El impacto fue mayor para Nvidia, ya que sus acciones tuvieron una caída de 7.0% al cierre de la jornada del pasado martes, sin que hubiera una razón clara.
Lo cierto es que la acción de la empresa dirigida por Jensen Huang se ha mantenido bastante volátil desde que se unió a la selecta lista de empresas estadunidenses con una valoración superior a dos billones de dólares.
Afortunadamente, Nvidia logró revertir esa pérdida en la jornada del miércoles al avanzar cerca de 10% gracias a los resultados de AMD, ya que la empresa de semiconductores mostró resultados financieros sólidos al obtener un beneficio neto de 265 millones de dólares en el segundo trimestre.
Esta volatilidad se debe a que el mercado está analizando el fuerte gasto que hacen las tecnológicas en inteligencia artificial y cuándo dicha inversión comenzará a rendir frutos.
Por ejemplo, Microsoft ha invertido cerca de 13 mil millones de dólares en la tecnología de OpenAI, mientras que Meta lo está haciendo fuertemente en el desarrollo de sus modelos de inteligencia artificial e incluso en GPU de Nvidia, aunque depende de los ingresos por publicidad de sus plataformas Instagram, Reels, Facebook y Messenger.
Esto se refleja en un estudio Gen AI: Demasiado gasto, muy poco beneficio, realizado por Goldman Sachs, porque varios expertos coincidieron en que esta tecnología no está diseñada para resolver problemas complejos que justificarían los costos.
“El punto menos discutible es que la inteligencia artificial es excepcionalmente costosa y, para justificar esos costos, la tecnología debe ser capaz de resolver problemas complejos, para lo cual no está diseñada”, advirtió el jefe de investigación de renta variable global de Goldman Sachs, Jim Covello.
Aseguró que los costos de esta tecnología no disminuirán con el tiempo, en particular porque la competencia en este mercado no es muy grande. Por ejemplo, Nvidia actualmente es el líder en la fabricación de GPU para inteligencia artificial y no cuenta con un competidor relevante.
Por su parte, Daron Acemoglu, profesor del Instituto Tecnológico de Massachusetts, consideró que el optimismo y exageración pueden conducir al uso prematuro de tecnologías que aún no están listas.
“Este riesgo parece particularmente alto hoy en día cuando se utiliza la inteligencia artificial para avanzar en la automatización. Demasiada automatización, demasiado pronto, podría crear cuellos de botella y otros problemas para las empresas que ya no tienen la flexibilidad y las capacidades de resolución de problemas que proporciona el capital humano”, advirtió.
Ambos expertos comentaron que los cambios verdaderamente transformadores derivados de la inteligencia artificial generativa no ocurrirán rápidamente y es probable que algunos ocurran en los próximos 10 años.
Fuente:Excelsior