El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció que su gobierno está dispuesto a participar en una tercera ronda de negociaciones con Ucrania, con el objetivo de explorar soluciones políticas al conflicto armado que enfrentan ambos países.
Aunque aún no se ha definido la fecha ni el lugar del encuentro, Estambul figura como la sede más probable, al igual que en las reuniones anteriores.
Putin señaló que los equipos negociadores, liderados por Vladimir Medinsky por parte de Rusia y Rustem Umerov por parte de Ucrania, mantienen una comunicación constante y trabajan para concretar los detalles del próximo diálogo.
Indicó que el tema central de esta nueva ronda será la discusión de los memorandos que ambas partes han elaborado, los cuales reflejan visiones opuestas sobre cómo alcanzar una resolución pacífica.
“No sorprende que los documentos sean tan distintos, precisamente para eso son las negociaciones: para encontrar puntos de encuentro”, expresó el mandatario tras participar en la cumbre de la Unión Económica Euroasiática, celebrada en Minsk.
Putin también destacó que el diálogo se reanudará luego de recientes intercambios humanitarios, como la entrega de restos de soldados ucranianos caídos. Según detalló, Rusia ya ha entregado más de seis mil cuerpos a Kiev y estaría dispuesta a transferir otros tres mil, si Ucrania lo acepta.
En otro frente, el líder del Kremlin criticó duramente la reciente decisión de la OTAN de aumentar su gasto militar al 5 % del PIB de cada país miembro para 2035. Acusó a la alianza de actuar con agresividad y culpó a Occidente de la escalada armamentista.
“Mientras la OTAN se rearma, nosotros planeamos reducir nuestro presupuesto militar a partir del próximo año”, afirmó, aunque admitió que actualmente el gasto militar ruso representa el 6,3 % del PIB y ha generado presiones económicas internas.Putin también abordó su relación con el expresidente estadounidense Donald Trump, a quien describió como “valiente” y “respetable”. Afirmó estar dispuesto a reunirse con él, aunque insistió en que un eventual encuentro debería prepararse cuidadosamente para tener un impacto positivo en la relación bilateral entre Moscú y Washington.
Finalmente, el presidente ruso reiteró que su país no busca agredir a Europa y justificó el gasto militar como una herramienta para lograr los objetivos de la “operación militar especial” en Ucrania. “No es para atacar, es para concluir nuestra misión con éxito”, concluyó.
