Culiacán, Sinaloa.- El secretario de Salud del estado, Cuitláhuac González Galindo, negó que personal médico del Hospital General de Los Mochis haya intervenido en el despido de Guadalupe —conocida como “Lupita”—, la guardia de seguridad que alertó sobre la muerte de un indigente a las afueras del hospital el pasado lunes.
Durante la conferencia de prensa de Vocería, el funcionario estatal aclaró que en ningún momento se giró instrucción desde la Secretaría ni desde el hospital para cesarla, y aseguró que la decisión fue tomada de manera unilateral por la empresa privada encargada del servicio de seguridad.
“Solicité más información para tener mayor certeza, pero fue una determinación de la empresa. No se emitió ninguna orden para que perdiera su trabajo, mucho menos por haber actuado como lo haría cualquier persona con sentido común ante una situación así”, señaló González.
El secretario de Salud insistió en que no se trató de una represalia, ya que la llamada de auxilio que hizo la guardia podría haber sido realizada por cualquier ciudadano.
“No hay ningún problema con lo que hizo. Cualquier persona que vea a alguien inconsciente debe actuar. Esa reacción no debe ser motivo de sanción”, subrayó.
Sobre el hombre en situación de calle que falleció, González Galindo informó que llevaba varios días en la zona del hospital y que incluso algunos trabajadores lo conocían y conversaban con él, ofreciéndole apoyo en distintas ocasiones.
Finalmente, el secretario instruyó al administrador del hospital para que se acerque a la guardia afectada, la escuche y busque posibles formas de respaldarla ante esta situación.