Los Mochis, Sin.– La titular de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable (SEBIDES), María Inés Pérez Corral, informó que en Sinaloa persiste el problema del desplazamiento forzado por violencia, con un registro de casi 1,800 familias afectadas desde el 09 de septiembre del año pasado a la fecha.
En los últimos meses, 328 familias se han visto obligadas a abandonar sus hogares, sumándose a un total de aproximadamente 1,500 familias desplazadas durante el último año, principalmente en los municipios de Concordia, Culiacán, Rosario, Elota, Cosalá, San Ignacio y Navolato.
María Inés explicó que, tras recibir reportes ciudadanos o de medios de comunicación, se activa un call center para ubicar a las familias y darles atención inmediata. Los apoyos incluyen alimentos, catres, cobijas, abanicos, kits de limpieza, artículos de primera necesidad y equipo médico como sillas de ruedas, bastones y muletas. La mayoría de los desplazados se refugia con familiares, amigos o rentando viviendas en zonas urbanas.
Finalmente, la funcionaria destacó que, en coordinación con la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Marina, Seguridad Pública estatal y municipal, se trabaja en reforzar la seguridad en comunidades como Caminaguato, Jesús María y Tepuche, con el fin de garantizar la libre movilidad de los habitantes.