Los Mochis, Sin.- En punto de las 8:00 horas, funcionarios ahomenses, regidores, militares y personal de las distintas corporaciones del orden, encabezados por el alcalde, Gerardo Octavio Vargas Landeros, se reunieron en la explanada de Palacio Municipal, a efectos de llevar a cabo el tradicional izamiento de bandera.
La ceremonia arrancó cuando una escolta conformada por elementos de la Policía Municipal entregó la monumental bandera a los servidores públicos, que respetuosamente levantaron el lábaro patrio.
Posteriormente, tuvo lugar la entonación de las gloriosas notas del Himno Nacional Mexicano. Inmediatamente después, cámaras y micrófonos se trasladaron a las inmediaciones de la Ciudad Deportiva Aurelio Rodríguez Ituarte, en el monumento a la Bandera.
Cabe mencionar que el Día de la Bandera fue establecido un 24 de febrero de 1934, representando un espíritu de unidad, valor y patriotismo como elemento unificador de la identidad mexicana.
En el monumento, se realizaron los honores al lábaro patrio, también se tomó protesta y se abanderaron las escoltas de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), y de la Universidad Autónoma Indígena de México (UAIM).
Igualmente, el juramento a la Bandera estuvo a cargo del joven Alejandro Aguirre y en este acto el Himno Nacional estuvo a cargo de alumnos integrantes del Coro de la Academia de Canto Pilar del Rocío.
El mensaje oficial lo emitió el secretario del Ayuntamiento de Ahome, exaltando los valores patrios y el devenir histórico de la Bandera Mexicana
La ceremonia cívica estuvo enmarcada por la Escolta y Banda de Guerra de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Municipio de Ahome. También, se contó con la presencia de contingentes de la Guardia Nacional, Sedena, el Sector Naval, así como de diversas instituciones educativos, que dieron realce al evento cívico.
Finalmente, se incineró un lábaro patrio que ya se había deteriorado, se explicó que cuando una bandera sufre un desperfecto, se debe calcinar, y las cenizas deben ser enterradas como un símbolo de regreso a las entrañas de la patria.
“La Bandera Nacional es un objeto sagrado, que incinerado y transformado en polvo, vuelve a sus orígenes. El emblema nacional, al ondear libre, nos recuerda lo más hermoso de nuestra patria superior, que nos unifica y nos obliga por igual, a la cual todos nos debemos, así piensa el pueblo mexicano de sus símbolos patrios”.
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