Pekín, — China y Estados Unidos confirmaron un nuevo avance en su relación comercial tras alcanzar un acuerdo que busca reducir tensiones en torno al comercio de tierras raras y medidas arancelarias.
El Ministerio de Comercio chino informó que, como parte del pacto, Washington eliminará ciertas restricciones comerciales, mientras que Pekín revisará y aprobará las exportaciones de productos estratégicos bajo control, incluyendo metales clave como las tierras raras.
Este entendimiento surge tras meses de negociaciones, primero en Ginebra y recientemente en Londres, donde ambas potencias acordaron retomar el marco de consenso alcanzado en mayo.
La prioridad para Estados Unidos ha sido garantizar el acceso continuo a tierras raras, fundamentales para sectores tecnológicos y de defensa, como la producción de baterías eléctricas, turbinas eólicas y sistemas militares.
China, que domina el mercado global de estos minerales, había comenzado a exigir licencias de exportación en abril, una medida que fue vista como una respuesta directa a los altos aranceles impuestos por la administración de Donald Trump.
Aunque inicialmente se pactó una reducción temporal de estos aranceles, surgieron desacuerdos cuando Washington acusó a Pekín de dilatar el proceso de licencias.No obstante, las recientes conversaciones en Londres permitieron consolidar un marco adicional de implementación del acuerdo original, según confirmó un funcionario de la Casa Blanca.
El propio Trump había anticipado el logro durante un acto público, aunque sin ofrecer mayores detalles.”Esperamos que ambas partes encuentren un punto medio”, señaló un portavoz del Ministerio de Comercio chino, al subrayar que Pekín cumplirá con la revisión de solicitudes conforme a su legislación, mientras que Estados Unidos procederá a retirar diversas restricciones comerciales.
Este acuerdo representa un nuevo intento por estabilizar las relaciones económicas entre las dos mayores economías del mundo, en un contexto de creciente competencia y sensibilidad geopolítica.
