Los Mochis, Sin.- Hacer un sacrificio conlleva elevar algo a la categoría de “santo”, entregarlo a las deidades, un ritual donde abandonas parte de tu esencia y de lo que te representa para que ahora pase a otro nivel de conciencia.
En teoría, un sacrificio conlleva esfuerzo, algo que te pesará abandonar.
Sin embargo, ya nadie realiza esa clase de sacrificios.
Un sacrificio histórico fue el de Sofía Chotek, quién a pesar de todo se aferró al amor por Francisco Fernando de Austria, para finalmente perecer, dando lugar a la catastrófica Primera Guerra Mundial.
Godiva, en protesta por las condiciones en las que vivía el campesinado de la Inglaterra medieval, se manifestó desnuda y a caballo para que mejoraran las condiciones del pueblo llano.
Cleopatra VII se sacrificó en el año 30 antes de nuestra era, renunciando a milenios de civilización egipcia.
En fin, todos estos casos de sacrificio elegidos conscientemente versan sobre mujeres que han abandonado parte de su esencia para luchar contra las corrientes de la historia o del destino que las pusieron en ese camino.
En México, los ejemplos de mujeres que se han sacrificado por el país son múltiples, desde féminas fundacionales, como lo son Malintzín, Margarita Maza de Juárez, o más recientemente Diana Laura Riojas.
Así, estamos a muy poco o nada, esto de acuerdo a algunos rumores surgidos en el seno de Palacio Nacional, de la declinación de una de las corcholatas (Ricardo Monreal), en favor de Claudia Sheinbaum, uno de esos sacrificios que no se veía venir…
