Acuerdo estratégico para reactivar Duane Arnold
Google dio a conocer este lunes un acuerdo con la eléctrica NextEra Energy para reactivar la planta nuclear Duane Arnold Energy Center, ubicada en las afueras de Cedar Rapids, Iowa. Cerrada desde 2020, la instalación volvería a operar a fines de 2028 con un objetivo claro: abastecer la creciente infraestructura de inteligencia artificial (IA) y servicios en la nube de la tecnológica.
La compañía firmó un contrato de compra de energía a 25 años, comprometiéndose a adquirir la producción completa de la planta una vez que esté de nuevo en funcionamiento. Según el anuncio conjunto, el acuerdo marca una nueva fase de colaboración entre los gigantes tecnológicos y el sector energético, en un contexto donde la IA emerge como uno de los mayores motores de demanda eléctrica a nivel global.
Proceso regulatorio y plazos estimados
El relanzamiento de Duane Arnold —una planta de 601 megavatios que fue clausurada tras sufrir daños estructurales por un temporal— no será inmediato. NextEra Energy, que ahora controla el 100% de la instalación tras adquirir la participación de accionistas minoritarios, ha iniciado el proceso regulatorio ante la Comisión Reguladora Nuclear (NRC) y ya obtuvo una exención de la Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC) para avanzar con los trabajos de recuperación.
Aunque inicialmente se hablaba de 2029 como fecha de reinicio, fuentes cercanas al proyecto apuntan a que NextEra busca adelantar la operación para finales de 2028, en línea con la construcción de nuevos centros de datos de Google en la zona.
Impacto energético y ambiental
La reactivación no solo responde a los intereses de Google. El plan ha sido presentado como una apuesta por fortalecer la seguridad energética regional, garantizar un suministro estable y contribuir a la descarbonización de la matriz eléctrica, ya que la energía nuclear no emite gases de efecto invernadero durante su operación.
Sin embargo, el camino no estará libre de obstáculos. Reactivar una planta nuclear cerrada implica una revisión exhaustiva de su estado estructural y operativo. Expertos advierten sobre posibles desafíos técnicos, como la corrosión o el deterioro de componentes clave, lo que podría elevar los costos y alargar los plazos.
La electricidad como insumo crítico para la IA
Con todo, el anuncio subraya una tendencia en ascenso: la convergencia entre tecnologías emergentes y fuentes de energía confiables. Frente al auge imparable de la inteligencia artificial, empresas como Google buscan asegurar desde ya el insumo más crítico de todos: la electricidad.
La planta nuclear Duane Arnold Energy Center fue la única instalación de generación nuclear en el estado de Iowa. Estuvo en operación desde 1975 hasta agosto de 2020, cuando se decidió su cierre definitivo tras daños causados por un derecho —un fenómeno climático caracterizado por tormentas intensas con vientos sostenidos similares a los de un huracán— que afectó su estructura.
La reapertura propuesta no implicará reactivar el reactor original BWR (boiling water reactor), sino que, según documentos presentados ante la Nuclear Regulatory Commission (NRC) y declaraciones de NextEra, el sitio será convertido para albergar reactores modulares pequeños (SMRs, por sus siglas en inglés), una tecnología emergente que promete mayor seguridad, eficiencia y menor huella ambiental. A octubre de 2025, ningún SMR ha sido aún construido y puesto en operación comercial en EE.UU., aunque la NRC aprobó en 2023 el primer diseño de este tipo: el NuScale Power Module.
La electricidad consumida por centros de datos —en especial aquellos dedicados a inteligencia artificial generativa— ha aumentado considerablemente. De acuerdo con un estudio publicado en septiembre de 2023 por la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés), el consumo eléctrico de los centros de datos podría duplicarse para 2026, alcanzando los 1,000 TWh anuales, comparable al consumo total de Japón.
Google ha señalado públicamente que su huella energética crece al ritmo de la adopción de IA, motivo por el cual ha aumentado sus inversiones en energías libres de carbono, incluyendo nuclear, hidroeléctrica y solar. Este tipo de acuerdos, conocidos como Power Purchase Agreements (PPAs), son clave para garantizar un suministro fijo y predecible, lo que es crítico en entornos de alta demanda computacional.
En cuanto al impacto económico, la reactivación del sitio de Duane Arnold podría generar cientos de empleos locales durante la fase de reacondicionamiento y construcción, así como decenas de empleos permanentes de alta especialización una vez que entren en operación los nuevos reactores.
A nivel estatal, Iowa obtiene actualmente cerca del 60% de su electricidad a partir de fuentes eólicas, siendo líder nacional en proporción de generación eólica. Sin embargo, la variabilidad de esta fuente ha impulsado el interés en tecnologías de carga base como la nuclear para complementar la matriz energética.
Fuente:Excelsior
 



