Culiacán, Sinaloa.- Aunque reconoció operativos exitosos y una mejor coordinación institucional, la diputada María Teresa Guerra Ochoa advirtió que Sinaloa enfrenta vacíos legales críticos y un rezago presupuestal que limita la eficacia de la seguridad pública.
Durante un posicionamiento en el Congreso, la legisladora señaló que la Comisión de Seguridad ha sostenido reuniones constantes con el secretario estatal del ramo, incluso antes de su comparecencia oficial, lo que ha permitido abrir una agenda común para atender temas urgentes.
“Desde su llegada, nos hemos reunido en varias ocasiones. Se han puesto sobre la mesa temas de fondo: profesionalización policial, creación de una ciberpolicía, e incluso una subsecretaría de investigación que dé soporte real a las tareas de inteligencia”, afirmó.
Privadas: riesgo legal y operativo
Uno de los focos rojos que expuso la legisladora es el crecimiento de los cotos residenciales o fraccionamientos privados, que, bajo reglamentos internos, impiden el acceso de policías, paramédicos e incluso familiares ante emergencias, lo cual puede facilitar actividades delictivas.
“La falta de una legislación clara sobre estos espacios es alarmante. En otras entidades ya hay normas específicas para regularlos. En Sinaloa estamos en pañales”, advirtió.
Pidió modernizar la legislación estatal y municipal para responder a este fenómeno urbano, cada vez más extendido en el estado.
Seguridad sin recursos no es posible
Guerra Ochoa también lanzó una crítica directa al déficit presupuestal en seguridad.
“Es contradictorio que hoy se exijan más recursos quienes antes aprobaron recortes. La seguridad no puede financiarse con discursos”, expresó.
Señaló que tanto el actual secretario como el Consejo Ciudadano de Seguridad han coincidido en la necesidad urgente de más inversión. “Sin recursos reales no hay policías capacitados, ni tecnología, ni prevención del delito”, insistió.
Operativos sí, pero con estrategia
La diputada reconoció los recientes operativos que derivaron en decomisos de armas y el descubrimiento de un narcotúnel, señalando que estos resultados evidencian un mayor nivel de coordinación entre Ejército, Guardia Nacional y autoridades estatales.
“Ese túnel no se construyó en semanas. La magnitud del armamento habla del tamaño del reto, pero también de que algo se está haciendo bien”, dijo.
También destacó el regreso de cámaras de videovigilancia como parte de una estrategia de prevención.
Hacia leyes modernas para ciudades modernas
Finalmente, subrayó que así como ya se han aprobado reformas sobre el “alconeo” o las “ponchallantas”, ahora toca avanzar en nuevas normativas que respondan a la realidad urbana actual.
“No podemos hablar de ciudades modernas con leyes del pasado. Desde temas estructurales hasta la planeación urbana, necesitamos una legislación con visión de futuro”, concluyó.
