Culiacán, Sinaloa.– Tras los recientes episodios de violencia ocurridos dentro del Hospital General de Culiacán, un contingente de alrededor de 100 trabajadores de enfermería, médicos y personal administrativo se manifestó este jueves para exigir que los pacientes heridos por arma de fuego sean atendidos por personal militar y no en el nosocomio.
El reclamo surgió luego de que una enfermera fue retenida ilegalmente por elementos federales, quienes la mantuvieron incomunicada, le tomaron fotos y videos, y posteriormente la trasladaron al Ministerio Público. Esto ocurrió tras la detención de una mujer vestida como enfermera que portaba una jeringa con sustancias desconocidas en el área de encamados.
Los trabajadores calificaron la retención de su compañera como una violación a sus derechos humanos y laborales, al haber sido mantenida contra su voluntad sin estar vinculada al incidente.
En respuesta, el secretario de Salud de Sinaloa, Cuitláhuac González Galindo, informó que se están revisando las medidas de seguridad en el hospital para garantizar la protección del personal y evitar que hechos como los registrados se repitan.